martes, 26 de enero de 2010

CUENTA CONMIGO, SEÑOR



Cuenta conmigo, Señor.
Porque me lo pides, Tu …
porque me lo pides,
te digo que puedes contar conmigo.
En medio del mar agitado de la vida,
tú me envías a los demás,
para que sea testigo del Evangelio;
para que sea entre ellos y para ellos,
ese «Pan partido»,
con que tú quisiste que te hiciéramos presente.
Hazme testigo de tu vida entregada:
mi corazón, llénalo de tu amor;
mis ojos, llénalos de tu ternura;
mis oídos, de tu atención;
mis pies, de tu diligencia;
mis manos, de tu entrega.
Gracias anticipadas, Señor,
por la vida que pueda hacer crecer.
Y gracias, sobre todo,
por la vida que has hecho nacer en mi corazón.

No hay comentarios: