lunes, 27 de febrero de 2012

M. PIEDAD INTERCEDE POR TU CONGREGACIÓN

Beata Madre Piedad de la Cruz,
el Corazón de Jesús te confió la misión de fundar un Instituto Religioso,
y tú obedeciste en pura fe y en total humildad.
Hoy te pedimos por tus Hijas,
las Hermanas Salesianas del Sagrado Corazón de Jesús,
por sus comunidades y por las obras apostólicas que llevan entre manos.
Intercede ante Cristo para que nunca les falte la Misericordia que ÉL te prometió;
y para que surjan muchas y santas vocaciones a esta Congregación que Tú fundaste.

Beata Madre Piedad de la Cruz,
ayúdanos a todos a seguir las huellas de Jesús como tú las seguiste,
fiel y generosamente.
Y así, contigo, podremos bendecir y glorificar a la Santísima Trinidad
y a María, Madre de Misericordia, por los siglos de los siglos. Amén

domingo, 19 de febrero de 2012

BARRO VOCACIONADO DE DIOS

Beata Madre Piedad de la Cruz,
tú fuiste ese barro tantas veces
soterrado, escondido, olvidado, minusvalorado y hasta despreciado.
Pero Dios te miró con amor...
vislumbró en sus divinos proyectos lo que podría hacer de ti,
lo que podría recrear en ti...
Por eso te escogió con preferencia entre tantos y tantos barros.
Te llamó desde tu pequeñez e insignificancia.
Te vocacionó a ser mujer consagrada en su Pueblo.
Tú te dejaste amar, llamar, escoger y vocacionar.
Respondiste a su amor y a su llamada mansa y dócilmente,
sin resistencias, sin condiciones, sin exigencias.
Madre Piedad de la Cruz, enséñanos a dejarnos amar, a dejarnos llamar, a dejarnos hacer,
por el divino Alfarero, como Barro vocacionado de Dios.

jueves, 2 de febrero de 2012

JORNADA MUNDIAL DE LA VIDA CONSAGRADA

Los consagrados están llamados por su vocación, consagración y misión a vivir un estilo de vida, que exige, en primer lugar, la santidad de vida a la que toda la Iglesia está llamada. Este estilo se expresa visiblemente en los consejos evangélicos vividos en comunidad. A través de ellos se manifiesta la radicalidad y la novedad del seguimiento de Jesucristo.

La consagración es así instrumento de nueva evangelización. El beato Juan Pablo II, en la exhortación apostólica Vita consecrata, en un número dedicado a la nueva evangelización, afirmaba que «para hacer
frente de manera adecuada a los grandes desafíos que la historia actual pone a la nueva evangelización, se requiere que la vida consagrada se deje interpelar continuamente por la Palabra revelada y por los signos de
los tiempos […] Las personas consagradas, en virtud de su vocación específica, están llamadas a manifestar la unidad entre autoevangelización y testimonio, entre renovación interior y apostólica, entre ser y actuar, poniendo de relieve que el dinamismo deriva siempre del primer elemento del binomio» (VC, 81).

Oh Señor: mira con ojos de misericordia a estos hijos tuyos y a estas hijas tuyas: un día nos llamaste y nosotros te seguimos. Lo dejamos todo por Ti. Renueva hoy en nuestras vidas el fuego ardiente del amor primero. Ayúdanos a caminar presurosos tras tus huellas e infunde en nuestros corazones el auténtico seguimiento que nace del Evangelio. Danos la adhesión del corazón a tu Palabra y la comunión sincera con nuestra Madre la Iglesia. Haznos fieles cooperadores de la Verdad y leales colaboradores de tu Reino.


miércoles, 1 de febrero de 2012

M. PIEDAD TESTIGO DE ESPERANZA

Esperanza es no bajar los brazos, confiar, esperar con la firme convicción de que sucederá lo que esperas, y de que si ello no ocurre es porque va a pasar algo mejor que lo esperado.
Esperanza es alegría, alegría del mañana si no puede ser hoy.
Esperanza es la respuesta de Dios a tus oraciones, a las veces que golpeas su puerta.
Y sobre todo esperanza es un sentimiento interno que te da fuerzas para seguir.
Cuando ves hambre, esperanza es pan para todos.
Cuando ves dolor, esperanza es alegría para todos.
Cuando ves necedad, esperanza es sabiduría para todos.
Cuando ves odio, esperanza es amor para todos.
Cuando ves intereses de unos pocos, esperanza es el interés de todos.
Cuando rezas a Cristo, esperanza es verlo bajar del cielo  y estar para siempre con el Señor .

Y ete mes de febrero, necesitamos vivir la esperanza. Pero no lo vamos  a hacer solos, lo haremos de la mano de la BEATA PIEDAD DE LA CRUZ. Ella va a ser nuestra compañera de camino, porque vivió la esperanza, porque la transmitió con los que más la necesitaban, porque fue TESTIGO DE ESPERANZA.

Hoy, como ella, estamos llamados, también nosotros, a ser testigos de esperanza.

¿TE ATREVES?...